Manifestar la alegría
En 1968 en el acto de promoción de los Peritos Mercantiles de la Escuela Comercial Nocturna de Villa Regina, se recibió con nosotros Remo Sgró Namuncurá.
Su padre era italiano y su madre, como lo denuncia el apellido, de origen mapuche.
El director le daba el diploma al padre, quien a su vez se lo entregaba al hijo.
Cuando el locutor anunció el nombre de Remo, don Sgró se levantó, recibió el diploma de manos del director y allí emocionado le agradeció lo que ellos como docentes habían hecho por su hijo.
Luego se dió vuelta, buscó a su hijo entre los egresados, caminó hacia él con el diploma levantado en la mano derecha, y siempre en voz alta, en una mezcla de italiano y castellano, comenzó a decir 'Remo, cuanto nos costó esto, no?, y siguió hablando, como buen tano emocionado.
Siguió como si el mundo se hubiera borrado y los únicos que existieran en el acto eran él (don Sgró) y Remo.
Pero resulta que nosotros, los que formábamos parte del pequeño mundo de esa lejana noche, estábamos allí, recibiendo (espiritualmente) y comprendiendo (racionalmente) las palabras de don Sgro y por tanto emocionados hasta las lágrimas.
No se si fue ese día que comprendí que las emociones hay que vivirlas.
Pienso que no, que el hecho por hermoso me quedó en la memoria y otro día ya más grande, con más agua bajo el puente, comprendí que definitivamente las alegrías hay que vivirlas. Si hay que manfiestarlas, hay que hacerlo.
Es posible que en el fondo del salón haya alguno que se ría, no importa, que se quede con su sonrisa condescendiente, ese está demasiado lejos de la condición humana que, aunque no sea original ni la mejor ni la única, es la que, modestamente, hemos elegido para vivir.
¿Cómo fue tu acto de egresado?
¿O el egreso de tu hijo o de tu nieto?
Lo que te propongo no es más que un juego por el que, tal vez, con sólo pensarlo, escribirlo o contarlo, te saque un momento de la gris cotidianeidad.
La Escuela Comercial Nocturna (hoy, CEM 83) de Villa Regina, cumple este año sus 50 años de existencia.
El acto por el quincuagésimo aniversario se llevará a cabo el sábado 24 de octubre, en horas de la noche en la sala teatro del Círculo Italiano de aquella Ciudad.
Su padre era italiano y su madre, como lo denuncia el apellido, de origen mapuche.
El director le daba el diploma al padre, quien a su vez se lo entregaba al hijo.
Cuando el locutor anunció el nombre de Remo, don Sgró se levantó, recibió el diploma de manos del director y allí emocionado le agradeció lo que ellos como docentes habían hecho por su hijo.
Luego se dió vuelta, buscó a su hijo entre los egresados, caminó hacia él con el diploma levantado en la mano derecha, y siempre en voz alta, en una mezcla de italiano y castellano, comenzó a decir 'Remo, cuanto nos costó esto, no?, y siguió hablando, como buen tano emocionado.
Siguió como si el mundo se hubiera borrado y los únicos que existieran en el acto eran él (don Sgró) y Remo.
Pero resulta que nosotros, los que formábamos parte del pequeño mundo de esa lejana noche, estábamos allí, recibiendo (espiritualmente) y comprendiendo (racionalmente) las palabras de don Sgro y por tanto emocionados hasta las lágrimas.
No se si fue ese día que comprendí que las emociones hay que vivirlas.
Pienso que no, que el hecho por hermoso me quedó en la memoria y otro día ya más grande, con más agua bajo el puente, comprendí que definitivamente las alegrías hay que vivirlas. Si hay que manfiestarlas, hay que hacerlo.
Es posible que en el fondo del salón haya alguno que se ría, no importa, que se quede con su sonrisa condescendiente, ese está demasiado lejos de la condición humana que, aunque no sea original ni la mejor ni la única, es la que, modestamente, hemos elegido para vivir.
¿Cómo fue tu acto de egresado?
¿O el egreso de tu hijo o de tu nieto?
Lo que te propongo no es más que un juego por el que, tal vez, con sólo pensarlo, escribirlo o contarlo, te saque un momento de la gris cotidianeidad.
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La Escuela Comercial Nocturna (hoy, CEM 83) de Villa Regina, cumple este año sus 50 años de existencia.
El acto por el quincuagésimo aniversario se llevará a cabo el sábado 24 de octubre, en horas de la noche en la sala teatro del Círculo Italiano de aquella Ciudad.
Allí estaremos.
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