Antonio Skármeta
Proviene de una familia de Dalmacia.
Es chileno.
Nació en Antofagasta el 7 de noviembre de 1940.
Estudió Filosofía y Letras en la Universidad de Chile; arte dramático en la Escuela de Teatro de Santiago; inglés en el Instituto Británico del vecino país.
Estaba terminando el secundario, cuando un viaje de estudio lo llevó a Machu Pichu. Allí descubre una América profunda y se descubre a sí mismo, interesado por la suerte de nuestros propios pueblos.
El inglés le sirvió para traducir a nuestro idioma obras de Melville, Fitzgerald y Mailer.
En 1969 ganó un premio en Casa de las América, Cuba, por su libro ‘Desnudo en el tejado’ que lo proyecta internacionalmente.
Estaba en París cuando Unidad Popular triunfa en las elecciones de su país.
Regresa a Chile para acompañar el proceso democrático.
Publica la revista ‘La Quinta Rueda’ donde a través de diversos puntos de vista se analizaba literatura y fútbol o literatura y boleros.
El golpe militar de 1973 prohíbe la circulación de varios libros suyos.
Muere su admirado poeta americanista Pablo Neruda.
Se instaló en Berlín donde escribe ‘Soñé que la nieve ardía’.
Colabora con exiliados chilenos en Europa.
Esta experiencia da lugar al libro ‘No pasó nada’.
Su interés por el cine lo llevó a escribir el guión de la película ‘La victoria’ del alemán Meter Lilienthal, donde una dactilógrafa del interior de Chile llega a la convulsionada Santiago y allí decide ser alfabetizadora renunciando a una vida burocrática.
Su obra más popular es ‘Ardiente Paciencia’ de 1985, que ha sido guión radial, obra de teatro y una película dirigida por el propio Skármeta.
El film italiano ‘Il postino’ es una adaptación libre.
El libro se ha traducido a 25 idiomas, en algunos lugares directamente se llamó ‘El cartero de Neruda’.
Es chileno.
Nació en Antofagasta el 7 de noviembre de 1940.
Estudió Filosofía y Letras en la Universidad de Chile; arte dramático en la Escuela de Teatro de Santiago; inglés en el Instituto Británico del vecino país.
Estaba terminando el secundario, cuando un viaje de estudio lo llevó a Machu Pichu. Allí descubre una América profunda y se descubre a sí mismo, interesado por la suerte de nuestros propios pueblos.
El inglés le sirvió para traducir a nuestro idioma obras de Melville, Fitzgerald y Mailer.
En 1969 ganó un premio en Casa de las América, Cuba, por su libro ‘Desnudo en el tejado’ que lo proyecta internacionalmente.
Estaba en París cuando Unidad Popular triunfa en las elecciones de su país.
Regresa a Chile para acompañar el proceso democrático.
Publica la revista ‘La Quinta Rueda’ donde a través de diversos puntos de vista se analizaba literatura y fútbol o literatura y boleros.
El golpe militar de 1973 prohíbe la circulación de varios libros suyos.
Muere su admirado poeta americanista Pablo Neruda.
Se instaló en Berlín donde escribe ‘Soñé que la nieve ardía’.
Colabora con exiliados chilenos en Europa.
Esta experiencia da lugar al libro ‘No pasó nada’.
Su interés por el cine lo llevó a escribir el guión de la película ‘La victoria’ del alemán Meter Lilienthal, donde una dactilógrafa del interior de Chile llega a la convulsionada Santiago y allí decide ser alfabetizadora renunciando a una vida burocrática.
Su obra más popular es ‘Ardiente Paciencia’ de 1985, que ha sido guión radial, obra de teatro y una película dirigida por el propio Skármeta.
El film italiano ‘Il postino’ es una adaptación libre.
El libro se ha traducido a 25 idiomas, en algunos lugares directamente se llamó ‘El cartero de Neruda’.
*** *** ***
He aquí un breve fragmento de ‘Ardiente paciencia’.
- Don Pablo, estoy enamorado, le dijo a Neruda el cartero Mario Jiménez mientras le entregaba un telegrama.
- ¿Has hablado con ella?
- Si maestro, cinco palabras, en la hostería. Le pregunté ‘¿como te llamái?’ Ella me dijo ‘Beatriz González’ y yo le dije ‘Beatriz González’ y me quedé mudo.
- Bien, ahora me dejas leer este telegrama, le pidió Neruda y le extendió un billete.
- Si no fuera mucha molestia, maestro, me gustaría que en vez de darme dinero me escribiera un poema para ella.
- ¡Pero si ni siquiera la conozco! se quejó el poeta.
Se necesita conocer a una persona para inspirarse.
No se puede inventar algo de la nada.
- Mire, poeta –lo persiguió el cartero- si se hace tanto problemas por un simple poema no va a ganar nunca el Premio Nobel.
Ese telegrama no es de Suecia ¿no?
- No, es del Comité Central del Partido.
¡Me ofrecen ser candidato a la Presidencia de la República!
Neruda dobló el telegrama y lo sepultó en el bolsillo trasero de su pantalón.
- Ahora vamos a la hostería a conocer a esa famosa Beatriz González.
- ¡Se va a morir de impresión! ¡Pablo Neruda y Mario Jiménez tomando vino juntos!
El vate echó a andar enérgicamente, y el cartero corriendo detrás.
- Don Pablo, si me caso con Beatriz González ¿Usted aceptaría ser el padrino de boda?
El poeta se acarició la barbilla rasurada y luego se llevó un dedo apodíctico a la frente.
- Después que nos tomemos el vino en la hostería, vamos a decidir sobre las dos cuestiones.
- ¿Cuáles dos?
- La Presidencia de la República y Beatriz González.
- ¿Has hablado con ella?
- Si maestro, cinco palabras, en la hostería. Le pregunté ‘¿como te llamái?’ Ella me dijo ‘Beatriz González’ y yo le dije ‘Beatriz González’ y me quedé mudo.
- Bien, ahora me dejas leer este telegrama, le pidió Neruda y le extendió un billete.
- Si no fuera mucha molestia, maestro, me gustaría que en vez de darme dinero me escribiera un poema para ella.
- ¡Pero si ni siquiera la conozco! se quejó el poeta.
Se necesita conocer a una persona para inspirarse.
No se puede inventar algo de la nada.
- Mire, poeta –lo persiguió el cartero- si se hace tanto problemas por un simple poema no va a ganar nunca el Premio Nobel.
Ese telegrama no es de Suecia ¿no?
- No, es del Comité Central del Partido.
¡Me ofrecen ser candidato a la Presidencia de la República!
Neruda dobló el telegrama y lo sepultó en el bolsillo trasero de su pantalón.
- Ahora vamos a la hostería a conocer a esa famosa Beatriz González.
- ¡Se va a morir de impresión! ¡Pablo Neruda y Mario Jiménez tomando vino juntos!
El vate echó a andar enérgicamente, y el cartero corriendo detrás.
- Don Pablo, si me caso con Beatriz González ¿Usted aceptaría ser el padrino de boda?
El poeta se acarició la barbilla rasurada y luego se llevó un dedo apodíctico a la frente.
- Después que nos tomemos el vino en la hostería, vamos a decidir sobre las dos cuestiones.
- ¿Cuáles dos?
- La Presidencia de la República y Beatriz González.
(De ‘Ardiente paciencia’-Antonio Skármeta-Editorial Sudamericana-Buenos Aires-1985)
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Dalmacia está ubicada en una región al sur de Croacia, frente al Adriático.
Dice el DRAE (Diccionario de la Real Academia Española) que apodíctico es ‘necesariamente válido’.
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